< PreviousEl rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 20 ECONOMÍA INFORMAL El 56,3 % ha participado de alguna actividad laboral informal durante el primer trimes- tre del año 2023. La figura 12 muestra las di- versas actividades laborales informales en las que los encuestados en Cuba han participa- do en este lapso de tiempo. El 43,7 % de los participantes afirma que no ha estado involu- crado en ninguna actividad laboral informal, lo que podría indicar que estas personas de- penden de ingresos formales, ya sea de em- pleos públicos o privados, o de otras fuentes de ingresos como las remesas. El segundo grupo más grande (19,9 %) menciona que participa en “otras” activida- des, lo que indica la diversidad y creatividad en las formas de generación de ingresos en el sector informal. Por otro lado, el 14,1 % de los encuestados participa en la venta ambu- lante. Esta es una forma común de actividad económica informal en muchas economías en desarrollo, donde las personas venden diversos bienes en las calles. El 10,5 % trabaja en reparación o construcción, probablemen- te ofreciendo sus servicios a particulares o en proyectos comunitarios. El 7,4 % se dedi- ca a la elaboración y venta de alimentos. Esto podría incluir la venta de comidas caseras, servicios de catering para eventos o venta de alimentos en la calle. Por último, el 4,4 % pro- porciona servicios de transporte. Esto puede incluir desde taxistas informales hasta aque- llos que ofrecen servicios de transporte para mercancías o productos agrícolas. La figura 13 ofrece una visión sobre cómo los participantes de la encuesta valoran la contribución de sus actividades laborales in- formales a los ingresos del hogar. De igual for- ma que en la anterior, el mayor grupo (43,5 %) no ha participado en ninguna actividad labo- ral informal, lo que puede indicar que depen- de únicamente de un empleo formal o que no trabaja. Sin embargo, un significativo 21,8 % considera que su actividad laboral informal FIGURA 12_ ACTIVIDADES LABORALES INFORMALES Venta ambulante Trabajos de reparación o construcción Servicio de transporte Elaboración y venta de alimentos Otras No he participado en actividad alguna 14,1 % 10,5 % 4,4 % 7,4 % 19,9 % 43,7 % 40 %60 %20 %0 % FIGURA 13_ IMPORTANCIA DE LA ACTIVIDAD INFORMAL COMO FUENTE DE INGRESOS EN EL HOGAR 60 %40 %20 %0 % No he participado en actividades informales Es la fuente de ingresos principal Es una fuente de ingresos importante Es una fuente de ingresos secundaria Es una fuente insignificante de ingresos 43,5 % 21,8 % 16,8 % 11,6 % 6,2 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 21 es la principal fuente de ingresos. Esto indica la relevancia del sector informal en la econo- mía cubana, ya que para estos encuestados la actividad laboral informal no es solo un complemento a sus ingresos, sino su princi- pal sustento. Además, el 16,8 % considera que su actividad informal es una fuente de ingre- sos importante, aunque no la principal. Por lo tanto, su trabajo informal es un componen- te crítico de su economía doméstica. El 11,6 % considera que su actividad laboral informal es una fuente secundaria de ingresos, lo que sugiere que, aunque no es esencial, todavía contribuye de manera significativa a los in- gresos del hogar. Finalmente, 6,2 % considera que su actividad laboral informal proporcio- na una fuente de ingresos insignificante. Para estos individuos, las actividades laborales in- formales pueden ser esporádicas o generar poco ingreso, y es probable que dependan de otras fuentes de ingresos. Estos datos demuestran que, para mu- chos cubanos, el trabajo informal juega un papel fundamental en su subsistencia. Esto puede deberse a varias razones, incluyendo la insuficiencia de los salarios en el sector for- mal, la falta de oportunidades de empleo en ese sector, y la flexibilidad que puede ofrecer el trabajo informal. La figura 14 nos proporciona información sobre la cantidad de tiempo que los encues- tados dedican a sus actividades laborales informales a lo largo de una semana. Los da- tos sugieren que existe una diversidad con- siderable en cuanto al tiempo que dedican las personas a sus actividades laborales in- formales, y que para un grupo sustancial de individuos estas actividades pueden repre- sentar un compromiso de tiempo significati- vo, lo que subraya la importancia del sector informal en la economía de Cuba. El grupo más grande, el 43,9 % de los encuestados, in- dica que dedica menos de 10 horas a la sema- na a su trabajo informal. Esto podría sugerir que estos individuos ven su actividad laboral informal más como un trabajo a tiempo par- cial o algo que hacen en su tiempo libre para obtener ingresos adicionales. Alrededor del 20,1 % de los encuestados dedica de 10 a 20 horas semanales a sus trabajos informales, lo que sigue siendo un compromiso de tiempo significativo. Es posible que estos encuesta- dos combinen su trabajo informal con otras obligaciones, como un trabajo formal o res- ponsabilidades familiares. Un 11,5 % dedi- ca de 21 a 30 horas semanales, lo cual es un compromiso de tiempo bastante considera- ble y sugiere que esta actividad puede ser una parte importante de sus medios de vida. Por último, 24,5 % de los encuestados indica que dedica más de 30 horas a la semana a su actividad laboral informal. Este grupo parece depender en gran medida del trabajo infor- mal, ya que su compromiso de tiempo supera FIGURA 14_ TIEMPO DEDICADO A LA ACTIVIDAD LABORAL INFORMAL DURANTE LA SEMANA De 21 a 30 horas De 10 a 20 horas Menos de 10 horas Más de 30 horas 24,5 % 11,5 % 20,1 % 43,9 % 40 %60 %20 %0 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 22 la carga horaria de un trabajo a tiempo par- cial típico e incluso se acerca o supera la car- ga horaria de un trabajo a tiempo completo. PARTICIPACIÓN EN EL SECTOR TURÍSTICO La figura 15 presenta las distintas actividades relacionadas con el turismo en las que los en- cuestados han estado involucrados en Cuba. El mayor grupo, que representa el 78,5 % de los encuestados, no está involucrado en nin- guna actividad turística. Esto podría deber- se a diversas razones, como vivir en una zona que no es un destino turístico, no tener las habilidades o recursos necesarios para tra- bajar en el sector del turismo, o simplemente preferir otras formas de empleo. Entre aquellos que sí están involucra- dos en el turismo, las actividades varían. Un 5,9 % trabaja en otras actividades no especificadas, seguido por un 3,6 % que tra- baja en restaurantes o paladares. El alquiler de habitaciones, con un 2,8 %, y el transpor- te turístico, también con un 2,8 %, son ac- tividades igualmente populares entre los encuestados. Estas actividades pueden re- querir menos recursos iniciales o habili- dades especializadas en comparación con otras, y por lo tanto podrían ser más acce- sibles para un mayor número de personas. Los guías turísticos autónomos represen- tan el 1,8 % de los encuestados. Los emplea- dos de hotel y de empresas turísticas, tanto formales como informales, representan un porcentaje similar, cada uno con un 1,1 % y 2,2 % respectivamente. En resumen, aunque la mayoría de los en- cuestados no están involucrados en el tu- rismo, una minoría significativa sí lo está (21,5 %), y sus actividades son diversas y FIGURA 15_ ACTIVIDADES LABORALES EN EL SECTOR TURISMO (FORMALES O INFORMALES) 6 %4 %2 % Alquiler de habitaciones (casa particular) Restaurante o paladar Empleado de hotel Otras Empleado de empresa turística informal Empleado de empresa turística formal Transporte turístico Guía turístico por cuenta propia 0 % 1,8 % 2,8 % 3,6 % 2,8 % 2,2 % 1,1 % 1,1 % 8 % 5,9 % FIGURA 16_ SATISFACCIÓN CON LOS INGRESOS REPORTADOS POR LAS ACTIVIDADES TURÍSTICAS 60 %40 %20 %0 % Muy satisfecho Satisfecho Ni uno ni otro Insatisfecho Muy insatisfecho 4,0 % 9,0 % 15,0 % 18,0 % 54,0 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 23 abarcan desde el trabajo en restaurantes y alojamientos hasta el transporte turístico y el trabajo como guías turísticos. Considerando solamente al grupo de en- cuestados participantes en actividades labo- rales turísticas (21,5 %), la mayoría no está satisfecha con los ingresos generados en los últimos tres meses (figura 16). En efecto, el 53,9 % se siente “muy insatisfecho” con sus ingresos de actividades turísticas, mientras que un adicional 17,4 % está “insatisfecho”. Por lo tanto, un total combinado del 71,3 % está insatisfecho con los ingresos generados por sus actividades turísticas. Por otro lado, el 15,4 % se sitúa en un punto medio (“ni uno ni otro”), no se siente ni satisfecho ni insatisfe- cho con sus ingresos del turismo. Finalmen- te, un pequeño porcentaje está satisfecho con sus ingresos del turismo: 9,1 % está “sa- tisfecho” y solo el 4,1 % está “muy satisfecho”. Este nivel de insatisfacción podría indicar que las actividades turísticas en este período no han sido lucrativas o que el sector turís- tico puede estar enfrentando desafíos, como una disminución en el número de turistas, mayores costos operativos, o cambios en las políticas o regulaciones que afectan a las em- presas turísticas. INTERACCIÓN CON EL SECTOR PRIVADO La figura 17 sugiere que una mayoría de los encuestados ha observado un aumento en la presencia de empresas privadas o negocios cuentapropistas en sus comunidades en los últimos tres meses. Esto puede ser un indica- tivo de crecimiento económico y desarrollo en esas áreas, aunque también puede plan- tear cuestiones relativas a la competencia, regulación e impacto en la comunidad. De los encuestados, el 64,8 % respondió afirmativa- mente, indicando que ha observado un au- mento en la presencia de estas empresas o negocios en su comunidad. Un 12,1 % dijo que no ha notado un aumento en la presencia de estas entidades. Esto sugiere que el creci- miento de las empresas privadas o negocios cuentapropistas puede estar concentra- do en áreas específicas, o que no todos los residentes están igualmente atentos a este tipo de cambios en su comunidad. Finalmen- te, un 23,1 % de los encuestados no está segu- ro de si ha habido un aumento en la presencia de estas entidades. La figura 18 indica la naturaleza de la inte- racción de las personas con empresas priva- das o negocios autónomos (cuentapropistas) en los últimos tres meses en Cuba. La mayor parte de la población encuestada (49 %) in- formó que no ha interactuado con empresas privadas o negocios autónomos en los últi- mos tres meses. Esta respuesta podría indi- car un cierto nivel de autonomía económica en el sector público, la dependencia de otras formas de ingresos, la falta de oportunidades FIGURA 17_ ¿HA OBSERVADO UN AUMENTO EN LA PRESENCIA DE EMPRESAS PRIVADAS Y NEGOCIOS CUENTAPROPISTAS? No Sí No estoy seguro 23,0 % 65,0 % 12,0 % 40 %80 %60 %20 %0 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 24 en el sector privado, o quizás desconfianza o insatisfacción con estas empresas. Para aquellos que sí interactuaron, la ma- yoría (27,8 %) lo hizo principalmente para la “compra de productos y servicios”. Esto muestra que las empresas privadas y los tra- bajadores autónomos juegan un papel cru- cial en el suministro de productos y servicios a una parte significativa de la población. El 10,3 % de los encuestados interactuó con es- tas entidades en busca de empleo, lo cual sugiere que las empresas privadas y los tra- bajadores autónomos son una fuente impor- tante de oportunidades laborales. El 6,1 % de los encuestados interactuó para “colaborar en actividades económicas”, lo que indica que hay una cantidad considerable de coopera- ción económica y posiblemente un alto gra- do de interdependencia entre los individuos y las empresas privadas o trabajadores autóno- mos. Por último, el 6,9 % restante interactuó con estas entidades por otros motivos no es- pecificados en la encuesta. La figura 19 muestra el nivel de satis- facción de los encuestados con la calidad y precio de los productos o servicios ofreci- dos por empresas privadas o negocios cuen- tapropistas en los últimos tres meses. Los resultados sugieren que existe una insatisfac- ción significativa con respecto a la calidad y el precio de los productos y servicios propor- cionados por empresas privadas y negocios cuentapropistas. Esto podría deberse a una serie de factores, como altos precios, mala calidad de los productos o servicios, falta de competencia, entre otros. En efecto, el 37,2 % de los encuestados que han interactuado con el sector privado se siente “muy insatisfe- cho” con la calidad y precio de los productos y servicios proporcionados por estas enti- dades. Además, el 21,1 % se siente “insatis- fecho”. Juntos, esto sugiere que una mayoría FIGURA 18_ PRINCIPAL MOTIVO PARA INTERACTUAR CON EMPRESAS PRIVADAS O NEGOCIOS CUENTAPROPISTAS 60 %40 %20 %0 % No ha interactuado Compra de productos y servicios Colaboración en actividades económicas Empleo Otro 49,0 % 27,8 % 6,1 % 10,3 % 6,9 % FIGURA 19_ NIVEL DE SATISFACCIÓN CON LA CALIDAD Y PRECIO DE LOS PRODUCTOS O SERVICIOS OFRECIDOS POR EMPRESAS PRIVADAS O NEGOCIOS CUENTAPROPISTAS Muy satisfecho Satisfecho Ni uno ni otro Insatisfecho Muy insatisfecho 40 %60 %20 %0 % 4,5 % 14,7 % 22,4 % 21,1 % 37,2 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 25 significativa de los encuestados (58,3 %) está insatisfecha en mayor o menor medida con la calidad y precio de estos productos y servi- cios. Por otro lado, el 22,4 % de los encues- tados tiene una opinión neutra, lo que indica que no están ni satisfechos ni insatisfechos. Finalmente, un 14,7 % de los encuestados se siente “satisfecho”, y solo un 4,5 % se siente “muy satisfecho”. Esto sugiere que una mino- ría de los encuestados está satisfecha con la calidad y precio de los productos y servicios proporcionados por empresas privadas o ne- gocios cuentapropistas. COMERCIO ELECTRÓNICO La figura 20 refleja el uso de plataformas en línea para realizar transacciones informa- les (como la compra o venta de productos o servicios) en los últimos tres meses por los encuestados. El 76,7 % de los participantes validó el uso de dichas plataformas, lo que indica que una gran mayoría de los encues- tados está recurriendo a métodos digitales para satisfacer sus necesidades comerciales en el contexto de la economía informal. Esto puede ser una respuesta a la actual crisis eco- nómica, la falta de productos en los canales tradicionales de distribución, y las restriccio- nes de movilidad. También demuestra la resi- liencia y la adaptabilidad de los hogares para encontrar maneras alternativas de satisfacer sus necesidades. Este alto porcentaje tam- bién sugiere que, a pesar de las restricciones a la conectividad en Cuba, la digitalización de la economía informal está progresando. Por otro lado, el 23,3 % de los encuestados no utilizó estas plataformas para transaccio- nes informales. Esto puede ser debido a va- rias razones, incluyendo la falta de acceso a Internet, la falta de habilidades digitales, la preferencia por las transacciones presencia- les o el acceso a bienes y servicios a través de otros medios. La figura 21 muestra los principales pro- ductos o servicios que los encuestados han ofrecido o adquirido por Internet. Los da- tos evidencian cómo la economía informal se está trasladando al espacio digital, particu- larmente en el contexto de la escasez y las di- ficultades de acceso a productos y servicios básicos. Los cubanos están utilizando Inter- net como un canal alternativo para satisfacer sus necesidades y, en algunos casos, generar ingresos adicionales a través de la venta de productos y servicios. Las categorías más destacadas son ali- mentos, ropa y electrodomésticos, con un 55,7 %, 18,9 % y 15,9 % respectivamente. Esto indica que los productos básicos y necesarios para el hogar son los más buscados y tran- saccionados en las plataformas digitales. El alto porcentaje para alimentos reafirma la crisis de inseguridad alimentaria que se está viviendo, y resalta cómo las familias están re- curriendo a las compras en línea para satisfa- cer sus necesidades básicas. FIGURA 20_ USO DE PLATAFORMAS EN LÍNEA PARA REALIZAR TRANSACCIONES INFORMALES (COMO LA COMPRA O VENTA DE PRODUCTOS O SERVICIOS) 80 %60 %40 %20 % Sí No 0 % 77,7 % 23,0 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 26 Los servicios de reparación y de trans- porte tienen una presencia menor con un 8,1 % y 6,2 % respectivamente, lo que puede ser un reflejo de que estos servicios se con- tratan más a nivel local y personal, o simple- mente no son tan demandados o accesibles en la economía digital. Un dato interesante es el 39 % de “otros” productos o servicios, lo que sugiere una diversidad de ofertas y demandas que no se cubren con las cate- gorías propuestas. Podría ser útil en inves- tigaciones futuras desglosar esta categoría para entender mejor qué otras transaccio- nes están ocurriendo en la economía infor- mal digital. La figura 22 muestra la frecuencia con la que los encuestados han recurrido a las pla- taformas en línea para realizar transacciones informales durante los últimos tres meses. El 17,8 % de los encuestados indica que utiliza estas plataformas diariamente, lo que sugiere una dependencia significativa de estas tran- sacciones digitales informales para satisfacer necesidades diarias. Podría implicar que es- tos individuos están inmersos en el comer- cio informal en línea de forma intensiva, ya sea vendiendo o comprando. Además, la ca- tegoría de aquellos que recurren a las pla- taformas de manera semanal representa el 26,1 %, y los que lo hacen mensualmente son el 21,0 %. Estos dos grupos, junto con el de los usuarios diarios, representan casi dos tercios de los encuestados (65,9 %), lo que sugiere que las transacciones en línea son una parte integral de la economía informal en la vida cotidiana de muchos cubanos. Por otro lado, el 34,1 % de los encuesta- dos afirma que rara vez utiliza estas platafor- mas para realizar transacciones informales. Este grupo podría estar compuesto por per- sonas que tienen otras vías para acceder a bienes y servicios o que simplemente no se FIGURA 21_ PRINCIPALES PRODUCTOS O SERVICIOS QUE HA OFRECIDO O ADQUIRIDO POR INTERNET Servicios de reparación Electrodomésticos Ropa Alimentos Otros Servicios de transporte 39,0 % 8,1 % 15,9 % 18,9 % 55,7 % 6,2 % 40 %60 %20 %0 % FIGURA 22_ FRECUENCIA DE USO DE PLATAFORMAS EN LÍNEA PARA REALIZAR TRANSACCIONES INFORMALES Diariamente Semanalmente Mensualmente Rara vez Nunca 30 %40 %20 %10 %0 % 17,8 % 26,1 % 21,0 % 34,1 % 1,0 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 27 sienten cómodas o no tienen la posibilidad de usar las plataformas en línea. Finalmente, solo el 1,0 % de los encuestados afirma que nunca ha utilizado plataformas en línea para realizar transacciones informales. Este por- centaje tan bajo subraya la importancia y la penetración de la economía informal digital en la sociedad cubana en medio de las ac- tuales dificultades económicas. La figura 23 muestra la satisfacción de los encuestados con su experiencia de rea- lizar transacciones informales a través de plataformas en línea durante los últimos tres meses. Un número importante de en- cuestados expresa cierto grado de insa- tisfacción con su experiencia de comercio electrónico informal: el 21 % se describe como “muy insatisfecho” y el 14,6 % como “insatisfecho”. Esto sugiere que aproxi- madamente un tercio de los encuestados ha enfrentado problemas o dificultades al realizar estas transacciones, lo que podría estar relacionado con factores como la fal- ta de garantías, problemas con la calidad de los productos o servicios, dificultades con el proceso de pago o entrega, o incluso pro- blemas con el acceso a Internet. La categoría más grande, sin embargo, es la de aquellos que indican sentirse ni satisfechos ni insatisfechos (“ni uno ni otro”), que consti- tuyen el 37,8 % de los encuestados. Este gru- po puede incluir a individuos que han tenido experiencias mixtas con el comercio electró- nico informal, o aquellos que, a pesar de los desafíos, ven estas transacciones como una necesidad dada la actual escasez de produc- tos y la inseguridad alimentaria. Finalmente, existe un grupo de encuestados que expre- sa satisfacción con su experiencia de comer- cio electrónico informal: el 22,9 % se describe como “satisfecho” y el 3,7 % como “muy sa- tisfecho”. Este grupo puede estar compuesto FIGURA 23_ SATISFACCIÓN CON LA EXPERIENCIA DE COMPRAR O VENDER PRODUCTOS O SERVICIOS (INFORMALMENTE) A TRAVÉS DE PLATAFORMAS EN LÍNEA 30 %40 %20 %10 %0 % Muy satisfecho Satisfecho Ni uno ni otro Insatisfecho Muy insatisfecho 3,7 % 22,9 % 37,8 % 14,6 % 21,0 % FIGURA 24_ PROBLEMAS O DIFICULTADES AL UTILIZAR PLATAFORMAS EN LÍNEA PARA REALIZAR TRANSACCIONES INFORMALES 60 %40 %20 %0 % Sí, problemas de confianza con vendedores/compradores Sí, problemas con los métodos de pago Sí, problemas de conexión a Internet Sí, otros problemas No he enfrentado problemas 15,7 % 8,0 % 54,1 % 4,1 % 18,1 %El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 28 por individuos que han logrado encontrar productos o servicios de calidad a través de estas plataformas, o aquellos que aprecian la conveniencia y el ahorro de tiempo que pro- porciona el comercio en línea. La figura 24 presenta los problemas y di- ficultades a los que se han enfrentado los encuestados al utilizar plataformas en línea para transacciones informales en los últimos tres meses. El mayor problema identificado por los encuestados es la conexión a Internet (54,1 %). Esto no es sorprendente dado que la conectividad a Internet en Cuba ha sido his- tóricamente limitada y costosa, aunque se ha ampliado en los últimos años. Sin embargo, este resultado destaca la brecha digital per- sistente y la necesidad de mejorar la infraes- tructura de Internet para permitir un acceso más amplio y confiable a estas plataformas en línea. El siguiente problema más comúnmen- te reportado es la falta de confianza en los vendedores o compradores (15,7 %). Esto su- giere que hay ciertas inseguridades asocia- das con las transacciones informales en línea, lo que podría incluir preocupaciones sobre la calidad de los productos o servicios, el cum- plimiento de las promesas de entrega, o po- sibles fraudes. Un 8,0 % de los encuestados informa tener problemas con los métodos de pago. Aunque no se especifica en detalle, es- tos problemas podrían estar relacionados con las restricciones para realizar pagos en línea en Cuba, la preferencia por el efectivo en las transacciones informales, o la falta de acceso a ciertas formas de pago digital. Un pequeño porcentaje (4,1 %) menciona otros problemas, lo que indica que existen otras barreras o di- ficultades no especificadas en el cuestiona- rio. Por último, un 18,1 % de los encuestados indica no haber enfrentado problemas al uti- lizar estas plataformas. Esto sugiere que, a pesar de los desafíos mencionados, existe un grupo de individuos que ha logrado adaptar- se y aprovechar las oportunidades que ofre- cen estas plataformas. ¿ESTÁ MITIGANDO LA ECONOMÍA INFORMAL LA INSEGURIDAD ALIMENTARIA EN CUBA? La tabla 2 muestra los resultados de una re- gresión lineal que busca predecir las dificul- tades para obtener alimentos básicos para el hogar en los últimos tres meses, conside- rando el impacto de la economía informal, y controlando algunas variables demográficas. Entre los principales resultados se destacan: Actividad informal: la relación con la dificultad para obtener alimentos básicos es negativa (beta = -0,038, t = -2,41); es decir, aquellos que participan en actividades informales tienen menos dificultades para obtener alimentos. Uso de Internet para transacciones informales: también tiene una relación negativa (beta = -0,061, t = -2,63), lo que indica que aquellos que usan Internet para transacciones tienen menos dificultades para obtener alimentos. Incremento de precios de productos: hay una relación positiva (beta = 0,52), lo que significa que un aumento en los precios de los productos se asocia con más dificultades para obtener alimentos. El valor p es <.001, lo que indica que este efecto es altamente significativo. Este es un fuerte predictor de las dificultades para obtener alimentos, lo que sugiere que la El rol de la economía informal en la mitigación de la inseguridad alimentaria en Cuba A rístides A. V ArA H ornA 29 inflación puede exacerbar las cuestiones de seguridad alimentaria. Incremento de ingresos en el hogar: aquí la relación es negativa (beta = -0,101), lo que indica que un aumento en los ingresos del hogar se asocia con menos dificultades para obtener alimentos. El valor p es 0,004, por lo que este efecto es significativo. Facilidad para encontrar productos básicos para el hogar: la relación es negativa (beta = -0,241), lo que indica que una mayor facilidad para encontrar productos básicos se asocia con menos dificultades para obtener alimentos. El valor p es <.001, lo que indica que este efecto es altamente significativo. Además de las variables individuales, la re- gresión también incluye categorías de ac- tividades informales realizadas, la principal fuente de alimentos, la categoría laboral, la región, edad y escolaridad. Cada una de estas categorías tiene su propio conjunto de coefi- cientes que también influyen en la dificultad para obtener alimentos. Los mercados privados y los mercados informales se asocian positivamente con las dificultades para obtener alimentos. Esto muestra la importancia de estos espacios es- pecialmente para las familias más vulnera- bles en términos económicos. Por otro lado, la ayuda de familiares y amigos (beta = 0,812, t = 5,0) se asocia con más dificultades para obtener alimentos, lo que puede sugerir que aquellos que dependen de la ayuda de otros para los alimentos pueden ser particular- mente vulnerables a la inseguridad alimenta- ria. La región oriental (beta = 0,294) se asocia con más dificultades para obtener alimentos y es significativa al nivel de confianza del 5 %. La edad (beta = 0,147) tiene una rela- ción positiva, lo que indica que es altamente significativa: a medida que las personas en- vejecen podrían enfrentarse a más barreras (como problemas de salud, falta de acceso a transporte, etc.) que dificultan su capacidad para obtener alimentos. Los resultados del análisis de regresión lineal sugieren que ciertos comportamien- tos y circunstancias de la economía informal pueden actuar como factores de protección, al reducir la posibilidad de que una perso- na experimente inseguridad alimentaria. La flexibilidad y la accesibilidad que ofrecen las actividades informales, las transacciones a través de Internet y los mercados informales pueden ayudar a las personas a navegar a tra- vés de los desafíos y barreras que a menudo es- tán asociados con la inseguridad alimentaria. En efecto, las actividades informales, como las actividades laborales no registra- das oficialmente, parecen tener un impacto protector contra la inseguridad alimentaria. El coeficiente negativo indica que la partici- pación en actividades informales está asocia- da con una disminución en la frecuencia de dificultades para obtener alimentos básicos. Esto podría ser porque las actividades infor- males, a pesar de su falta de formalidad y de protecciones laborales, proporcionan un flu- jo de ingresos esencial que ayuda a las per- sonas a comprar los alimentos que necesitan. De igual forma, el uso de Internet para tran- sacciones también tiene un coeficiente nega- tivo, lo que sugiere que aquellos que utilizan Internet para transacciones comerciales tie- nen menos dificultades para obtener alimen- tos básicos. Este resultado puede reflejar el hecho de que el uso de Internet puede Next >